Estamos de suerte y hoy en el blog tenemos un invitado muy especial, Oriol Lugo Co-Director del OWL INSTITUTE. Oriol es doctor en psicología y escritor de 13 libros sobre Crecimiento Personal, Psicología, Neurociencias y Coaching.
Y nos va a hablar de la neurociencia en la educación:
La Neuroeducación la podemos definir como “un área de investigación educativa que está basada y respaldada por teorías, métodos resultados provenientes de las neurociencias y a la vez también de la neurociencia cognitiva” (Patten, y Campbell, 2011, p.8).
Si conocemos mejor sobre la estructura y el funcionamiento humano, podemos adaptar algunos elementos para mejorar cómo aprendemos y cómo vinculamos lo que vamos integrando.
En lo que se refiere a las aulas, se espera una gran transformación a medida que vayamos implementando estos nuevos conocimientos. No podemos seguir con unas metodologías del pasado si sabemos por ejemplo más acerca de los procesos de atención, de memorización y también de evocación de los recuerdos.
Algunos elementos a tener presentes en las clases para poder aprovechar al máximo la Neuroeducación (Guillén, 2017) son:
-Educar con emociones más adaptativas. Las emociones no son positives ni negativas, pero sí que hay emociones que son más agradables de experimentar que otras.
Las emociones facilitan la consolidación de la información. Y si lo hacemos con emociones que nos conectan con estados placenteros, reforzamos las ganas de aprender en los alumnos/as.
Algunas de ellas son:
- La alegría.
- El entusiasmo.
- La sorpresa.
- El humor.
- La calma.
- La serenidad.
- …
Así que pensar en favorecer estos estados emocionales es equivalente a facilitar una base para el aprendizaje.
Un cerebro relajado aprende más. Un cerebro estresado no está en un estado óptimo para aprender. Si estamos estresados/as entonces nuestra mente se centra en poner fin al estímulo que genera el malestar. No hay cabida para nada más.
La atención es el primer filtro a tener en cuenta para poder luego captar la información. Debemos trabajar con prácticas que ayuden a generar motivación y atención. Si no hemos captado la atención de nuestros alumnos por mucho que demos contenido este no será luego procesado.
Si conocemos como funciona nuestra memoria, podemos usarla mucho mejor. Por ejemplo, podemos introducir prácticas para recordar de manera espaciada, con intercalación y técnicas variadas. Hemos de terminar con el “vómito” que se produce en los exámenes y que no produce un auténtico aprendizaje,
Tenemos que usar el cuerpo. El cuerpo también nos ayuda a aprender, y podemos utilizarlo para poder cambiar nuestros estados de ánimo, así como para poder también incorporar nuevos aprendizajes. Si te fijas un niño/a acaba pasando un gran número de horas sentado en una silla. Porque no podemos movernos mientras aprendemos a hacer cálculo o geografía.
El juego es una manera de aprender y de conectar con emociones positivas. A través de la gamificación podemos generar mucho más interés en los alumnos.
Desarrollar la creatividad y habilidades artísticas es un elemento crucial para poder desarrollar el cerebro en todas sus áreas y facetas. Cuando trabajamos desde estas facetas podemos desarrollar elementos que luego se acaben por conectar.
Al final nuestras vidas pueden mejorar gracias a los últimos avances en la ciencia y en la tecnología. Es ahora el momento de sacarles más partido.
Dr. Oriol Lugo Real
Bibliografía:
Patten, K. E., & Campbell, S. R. (Eds.). (2011). Educational Neuroscience: Initiatives and Emerging Issues (Vol. 25). John Wiley & Sons
Guillen, J.C. (2017). Neuroeducación en el aula: De la teoría a la práctica.
Muchas gracias Oriol por introducirnos en este tema complejo pero necesario para mejorar en nuestro trabajo.
El 15 de octubre tendremos una Masterclass con Oriol para profundizar en este campo, tienes toda la información aquí, y la masterclass aquí:
