La actividad consiste en durante una o dos sesiones de clase ellos sean los docentes. Cada día un estudiante o pareja de estudiantes darán clase sobre un tema que a ellos les interese. La clave está en que el tema es totalmente libre, no tiene que ver con la asignatura, ni proyecto de clase ni […]
La actividad consiste en durante una o dos sesiones de clase ellos sean los docentes. Cada día un estudiante o pareja de estudiantes darán clase sobre un tema que a ellos les interese. La clave está en que el tema es totalmente libre, no tiene que ver con la asignatura, ni proyecto de clase ni nada. Algo que les gusta y sobre lo que tienen ciertos conocimientos que pueden compartir con la clase.
Esta actividad la llevé a cabo con alumnos de 2º de PCPI (Programa de Cualificación Profesional Inicial), ahora Formación Profesional Básica. Pero realmente se puede trabajar también en Secundaria en tutoría, o en Primaria adaptándola también.
La actividad surge porque se habían identificado problemas de autoestima y motivación, llegando a autodefinirse como fracasados los propios estudiantes. Además de falta de valoración del trabajo de los docentes. Sumado a que después de un mes de clases seguían sin conocerse y sin abrirse en clase para hablar sobre sus interéses, más allá de temas relacionados con las clases o temas más generales como el fútbol o televisión.
Inicialmente la propuesta fue buen recibida, pero al día siguiente comenzaron a decir que preferían dar clase, que no les gustaba la actividad. Les pedí que rellenaran una plantilla como la que tenéis aquí y se quedaron bloqueados ante el papel en blanco.
Primero se frustaron porque no sabían de qué hablar. Así que dedicamos un rato en clase a hablar sobre cosas que les gustaba hacer o temas sobre los que habían investigado por su cuenta para detectar los temas de cada uno. Cuando encontraron algo que a ellos les gustaba y al resto de la clase les interesaba era como un subidón para ellos y mejoró mucho la cohesión del grupo.
Se trata de alumnos que no pudieron durante su escolarización obligatoria conseguir el título de Enseñanza Secundaria Obligatoria. Y en este programa los alumnos tiene una parte con los contenidos de la ESO y otra con una introducción a alguna profesión, en este caso era a la Informática. Una de los problemas que detecté en estos alumnos era que les han estado mostrado demasiadas veces sus defectos y fracasos, por lo tanto hablan de ellos mismos como fracasados con los que no vale la pena esforzarse. Creen que en todos estos años no han aprendido nada útil y no tienen nada que aportar a los demás.
Mi tarea era formarles como profesionales, por lo que para ello necesitaba quitarles esa idea de la cabeza y mostrarles sus capacidades, ayudarles a encontrarlas y trabajar en ellas para que marquen su diferencia.
Con el programa “Profes por un día” se trata de que den una clase donde compartan algo que les guste, que sepan hacer con el resto de su clase. Ser los protagonistas y responsables del desarrollo de la clase. Vetando ciertos temas de interés de masas como el fútbol, para que busquen más allá.
Para que sean conscientes de que es una tarea seria, y que tienen que comportarse com profesionales y no se trata de una hora libre, deben hacer un guión de la clase con los siguientes puntos:
- Objetivos
- Contenidos y Distribución temporal
- Metodología: Teoría y Actividades
- Recursos
- Evaluación: se pueden proponer exit tickets, o una autoevaluación o un juego.
Resultados
El resultado fue que Descubrieron que tiene algo que aportar y que son escuchados. Encontraron algo que a ellos les gustaba y al resto de la clase les interesaba. Era un subidón para ellos, y mejoró su motivación y autoestima.
Además de ver con nuevos ojos a sus compañeros. Las conversaciones después fueron más variadas y enriquecedoras. Mejoró mucho la cohesión del grupo y el compañerismo.
Y vieron la educación desde otro punto de vista y valoraron más el trabajo docente y lo que es una clase, fueron más participativos y es cierto que nunca tuvimos problemas de comportamiento o respeto entre ellos y hacia las profesoras.
Recomendaciones
- Empezaría con dinámicas sobre sus interés y autoconcepto.
- Dedicar un tiempo en clase a preparar su clase y que la plantilla sea libre y la diseñen ellos.
- Además fomentaría que fuera una actividad individual, para que cada estudiante pueda mostrar sus propios intereses. Pero dejándoles trabajar en parejas si es un interés común y de verdad cada uno puede aportar en la misma manera.
Plantilla para descargar abajo.
La experiencia fue:
- En el arranque: necesitaron más de una semana para elegir un tema, estaban perdidos y no eran capaces de encontrar un tema de su interés sobre el que construir la actividad. Se trabajó mediante conversaciones informales que temas eran de su interés. Además de dedicar un tiempo a explicar la plantilla que debían entregar y revisión de sus presentaciones.
- En el desarrollo: estaban muy nerviosos por como iban a reaccionar sus compañeros, les daba vergüenza por si no les gustaba. Pero al final, al ver el interés de sus compañeros (fueron muy respetuosos) se animaron y se notó cómo se vieron reforzados.
- En el final: Descubrieron que tiene algo que aportar y que son escuchados. Además de ver con nuevos ojos a sus compañeros. Empatía y cohesión del grupo. Las conversaciones después de la actividad fueron más variadas y enriquecedoras.
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